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martes, 26 de febrero de 2008

La ineficacia del Prozac


Si algunos estamos hartos de decirlo. Los antidepresivos no sirven para nada, o para casi nada. En la mayoría de los casos no están haciendo efecto. Pero no es un tema fácil. Muchos profesionales, médicos y psiquiatras, mandan antidepresivos con demasiada facilidad, por dos motivos. Primero porque no saben hacer otra cosa. Segundo por la fuerza inevitable de la industria farmaceútica, que los invita a viajes, incentiva determinadas investigaciones y hasta influye en los políticos para legislar (la prueba la tenemos en nuestro congreso con la ley del tabaco, al final se pagan los parches de nicotina pero no una sesión de psicoterapia, absurdo). Aunque yo creo que es más importante lo primero, o sea, la capacitación de los profesionales. Los médicos no tienen ni idea, ni tienen por qué tener ya que en seis años de facultad solo tienen una asignatura que se llama psicología. De psicoterapia nada de nada. A los psiquiatras les pasa lo mismo, dos años más sin formación psicoterapeútica. Los únicos buenos que conozco se han formado por su cuenta con cursos y master de psicoterapia, y esos sí que saben, claro, además tienen diversas herramientas, la farmacología incluida. Pero la mayoría lo único que saben es que si recetan Prozac dentro de quince días el enfermo se sentirá mejor. Ahora un estudio demuestra que muchos de ellos mejora por el efecto placebo. Menudo descubrimiento, si ya lo utilizaban los egipcios, siempre ha habido brujos y curanderos. Yo lo utilizaba con mi abuelo, quien se quedó ciego su último año de vida. Estaba acostumbrado a tomas varios calmantes diarios, Optalidón, que por cierto ya no se ve, para el dolor de cabeza. Empecé a darle Lacasitos, que eran de colores pero tenían la misma forma. Y el dolor se le quitaba igual. También lo utilicé con mi abuela, ya que le traje una virgen de plástico llena de agua bendita de Lourdes. Salvo que olvidé llenarla y lo hice cuando llegue a casa, del grifo. Nunca se enteró pero cada vez que le dolía el estómago echaba unas gotitas en un vaso de agua y se lo bebía. Y claro, se le quitaba el dolor. Bueno, el efecto placebo está suficientemente demostrado, así que los médicos deberían recetar lacasitos y mandar a los pacientes con depresión a un psicoterapeuta, o sea, a un profesional de la psicología o la psiquiatría que sepa hacer terapia. Porque además, si la psicoterapia está suficientemente demostrada para tratar depresiones ¿por qué tomar medicación? En caso de que los dos tratamientos fueran eficaces ¿por qué no elegir el más saludable? Los médicos dicen muchas veces eso de "farmacología combinada con psicoterapia" porque ellos recetan medicamentos, claro. A ninguno se lo ocurre decir "solo psicoterapia" que ya se ha demostrado su eficacia. En fin, que hay que seguir luchando por las injusticias de la salud mental y sus tratamientos.
Aquí teneis el artículo completo en inglés.

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